Serie A: Su propia medicina

Milan ganaba 2-0 en el San Paolo con dos goles tempraneros, pero se descuidó en el final y Nápoli igualó.VE ACÁ LOS GOLES.

Fue un partido muy raro, con un inicio fulminante y un final apasionante, con el el medio 80 minutos de poco fútbol y espectáculo. Milan se puso arriba en los primeros cinco minutos con los goles de Filippo Inzaghi y Alexandre Pato, pero en tiempo de descuento Nápoli lo igualó con un torpedo de Luca Cigarini y un cabezazo de Germán Denis.

Con este resultado, Milan suma 16 puntos y comparte la quinta plaza con Genoa, mientras que Nápoli, que tiene 14, se ubica en la novena posición junto a Bari, Chievo y Udinese.

El arranque de Milan fue demoledor, pero también contó con la ayuda de la última línea local, que Walter Mazzarri había parado en línea de cuatro y que decidió de jugar con el off side demasiado cerca de la línea central.

Así, un pelotazo central de Seedorf lo dejó a Inzaghi mano a mano con De Sanctis y Superpippo, es sabido, jamás desperdicia esas chances. Luego, otro pelotazo encontró la cabeza de Inzaghi, quien la peinó hacia la derecha, por donde ingresaba, a dos metros de su mitad de la cancha, Pato, absolutamente bien habilitado. El brasileño llegó hasta el área y lo fulminó a De Sanctis con un remate inatajable.

No fue fácil para Nápoli levantarse luego de semejante doble cachetazo. El equipo local lo hizo en la segunda etapa, luego de un primer tiempo en el que la defensa de Milan pudo dormir sueños tranquilos, más allá de un remate de Hamsik al primer palo que Dida contuvo sin transpirar.

Las cosas cambiaron bastante a comienzo de la segunda etapa, cuando Nápoli volvió a la cancha con energías renovadas, pero Dida vistió el traje de Superman y atajó realmente de manera extraordinaria, en dos ocasiones, ante Maggio y Quagliarella, directamente desde el piso, increíble: fue por lejos la figura de la cancha.

Milan reaccionó, enfrió el trámite y hasta tuvo un par de chances para liquidarlo, pero el partido se iba tranquilito hacia el final cuando pasó lo imprevisto: Abate vio la segunda amarilla y dejó a su equipo en diez, luego Cigarini, en jugada de tiro de esquina, adivinó un remate impresionante desde unos 30 metros y la clavó en el ángulo superior a la izquierda de Dida.

Faltaban cuatro de los cinco minutos de descuento decretados pro el referí. El rugido del San Paolo empujó hacia adelante a los locales y otra vez fue decisivo Denis, quien había ingresado minutos antes por Quagliarella y encontró el empate con un hermoso cabezazo desde el punto del penal, en ocasión de un centro de Maggio desde la derecha.

Así, Milan probó su propia medicina y Leonardo deberá morderse las manos por la actitud demasiado prudente de todo el segundo tiempo. Mazzarri salvó su invicto y toda Nápoli sueña con un puesto en Europa.